Leyes y Poesia

Ya acabado mi ultimo enfrentamiento y tras lograr la victoria iba por el camino con un sentimiento de felicidad, pues bastante grande. Al seguir por un tiempo mi camino me di cuenta de haber notado a un hombre en una yegua justo adelante mio, así que le sugerí que siguiera su camino con migo si no le molestaba. Este hombre acepto, Don Diego de Miranda. Don Diego me contaba como como era un hombre di bien el cual se dedicaba a obras de caridad para gastar su tiempo. Lo cual me pareció muy noble de su parte. Además menciono a su hijo quien recientemente había vuelto de estudiar leyes en la universidad, pero pero quien no quería continuar haciéndolo debido a la poesía. Ahh la poesía es que seria del mundo sin la poesía, me imagino un lugar gris y sin alegría. Pero Don Diego no estaba nada satisfecho con la desición que había tomado su hijo. Por lo cual le regañe y le dije que no hay nada de malo con la poesía. "Ya que no importa que seamos siempre y cuando decidamos ser los mejores".Luego de la charla sobre la poesía que tuvimos la cara do Don Diego cambio como si se hubiera dado cuenta de algo importante. Así que me sentí mas alegre de lo que ya estaba ya que pude ayudar a otra pobre alma. Al terminar nuestra charla note unas banderas flameado a lo lejos no se porque pero en ese instante supe que una nueva aventura estaba por comenzar.